La búsqueda de un equilibrio entre la vida laboral y la personal está en el corazón de muchas diatribas sobre el lugar de trabajo.
Es lo que muchos miembros de la generación Z quieren de su trabajo y a lo que se aferran los trabajadores cuando sus jefes les piden que vuelvan a la oficina.
En general, se conoce como el equilibrio entre el tiempo que pasamos en el trabajo y el tiempo libre. Pero deberíamos replanteárnoslo, según algunos especialistas en el sector laboral.
Cada persona trabaja de forma diferente, y sugerir que la mejor manera de alcanzar el equilibrio es desconectarse a las 5 de la tarde podría pecar de simplista y obsoleto.
«No creo que exista el equilibrio entre la vida laboral y personal», explica a Business Insider Dilan Gomih, fundador y director general de la consultora de bienestar y rendimiento laboral Dilagence. «Tendría que plantearse así: “¿Cómo encuentras tiempo para recargarte estratégicamente?”
La conciliación de la vida laboral y la personal
Jeff Bezos habló de su aversión a la expresión «equilibrio entre trabajo y vida personal» en 2021, calificándola de «debilitante» y diciendo a los empleados que deberían pensar en el trabajo y la vida como un círculo. Otros consejeros delegados también tienen sus propias opiniones, a menudo con un enfoque diferente.
En una entrevista en la Code Conference de Vox en 2016, Bezos dijo: «creo que cuando soy feliz en el trabajo, llego a casa con más energía. Soy un mejor marido, un mejor padre, y cuando soy feliz en casa, llego siendo un mejor jefe, un mejor colega».
Algunos dirán que es fácil para los CEO multimillonarios decir que el tiempo invertido no importa y que lo que cuenta es la energía que te da el trabajo.
Sin embargo, siempre que el trabajo no se apodere de todo tu tiempo personal, puede que sea sensato replantearse la definición del equilibrio entre la vida laboral y la personal.
Veronica West, psicóloga con un máster en salud pública y fundadora de My Thriving Mind, explica a BI que el equilibrio entre el trabajo y la vida personal es «el escurridizo logro que todos intentamos alcanzar».
«Solía significar dividir el tiempo de trabajo y el tiempo personal a partes iguales», dice. «Pero seamos sinceros, la vida rara vez se presta a eso».
Una forma mejor de verlo podría ser la existencia de un «ritmo vida-trabajo», que no se basa en contar horas, sino en «sentir que tanto el trabajo como la vida te dan energía en lugar de agotarte».
No todo el mundo puede desconectarse a las 5 de la tarde todos los días, por lo que resulta beneficioso encontrar un flujo en el que el trabajo no te agote, de modo que tengas tiempo para tus aficiones, hacer ejercicio, relajarte, socializar y pasar tiempo con tu familia.
«El truco está en aprender a equilibrar la energía, no solo el tiempo, para sobrevivir y disfrutar de cada parte del día», afirma West. «Porque, sinceramente, si nos tenemos que dejar la piel en una para poder estar en otra, ¿dónde está la gracia?»
Encontrar la «hora dorada»
Según Gomih, existe la idea generalizada de que bienestar significa desentendimiento, y esa es «una visión muy binaria» que debería reconsiderarse.
En su lugar, la gente debería pensar en cuál es su «hora dorada», dice, describiéndola como el momento en que «tu cerebro está totalmente encendido o cuando estás haciendo los razonamientos más creativos».
«Mi hora dorada oscila probablemente entre las 6.00 y las 9.00. También conozco a alguien cuya hora dorada es de 19.00 a 24.00», explica Gomih.
Las mujeres pueden sentirse especialmente conflictivas a la hora de compaginar su carrera profesional y su tiempo libre, sobre todo cuando se juzga su trabajo más allá del horario habitual.
«Las mujeres directivas que, de alguna manera, están a cargo de otras personas, tienen mucho que hacer», añade Gomih. A ellas trabajar en horarios irregulares puede convenirles más.
«Se trata de conocer tus propios parámetros, cuándo desconectar y cuándo conectar», afirma Gomih. «Pasar tiempo con mi familia me colma de alguna manera, y ser bueno en mi trabajo me colma de otra, y ambas se refuerzan mucho entre sí».
Breese Annable, psicóloga clínica diplomada y orientadora profesional, explica a BI que lograr el equilibrio significa alinear la vida personal y la profesional con los valores y puntos fuertes de cada uno.
«No se trata solo de dividir las horas; es una forma de vivir en la que todas las partes de la vida, incluido el trabajo, reflejan quién eres y qué es lo que más te importa», afirma.
«Por supuesto, esto es un ideal —nunca será perfecto», dice Annable. «Pero es una visión coherente para guiar las decisiones que tomes tanto en la vida como en el trabajo».
West afirma que algunos días necesitarán más trabajo y otros más vida. La clave está en buscar la armonía, no la perfección.