Hay una frase que siempre escucho: «No puedo porque no tengo los recursos.»
Y cada vez que la escucho, me pregunto:
¿Y si no se trata de lo que no tienes, sino de lo que sí tienes y aún no estás usando?
Déjame contarte algo muy personal.
Cuando quise mudarme a Estados Unidos, parecía imposible. No tenía los recursos económicos ni las conexiones necesarias. Pero decidí no enfocarme en lo que me faltaba, sino en lo que sí podía hacer.
¿Mi solución? Aplicar a una beca. No fue fácil, pero fue una de las mejores decisiones de mi vida.
Esa decisión no solo cambió mi entorno, cambió mi mentalidad. Me enseñó que el éxito no depende de lo que tienes al inicio, sino de lo que haces con ello.
Esto no es solo motivación; es ciencia.
Según estudios de neuromarketing, nuestro cerebro está diseñado para enfocarse en los problemas y las carencias porque está programado para la supervivencia.
Pero, cuando entrenamos nuestra mente para identificar las oportunidades en lo que ya tenemos, activamos el sistema de recompensa cerebral, lo que aumenta nuestra motivación y nuestra capacidad de actuar.
Así que, si sientes que no tienes los recursos suficientes para avanzar, haz esto:
1️⃣ Haz un inventario: No solo de cosas materiales, sino también de tus habilidades, contactos y conocimientos. A veces, lo que necesitas ya está ahí, pero no lo estás viendo.
2️⃣ Encuentra un punto de partida: No subestimes lo pequeño. Cada gran proyecto comienza con un paso inicial, por más sencillo que parezca.
3️⃣ Actúa: El peor enemigo del progreso es la inacción. No importa cuánto tengas, importa lo que hagas con ello.
El éxito no se mide por lo que tienes, sino por lo que haces con ello.
Ahora quiero que pienses: ¿qué decisión puedes tomar hoy que cambie tu situación actual?
Un abrazo,
Vilma Núñez, Ph.D.
Fundadora del Grupo Convierte Más
Speaker | Autora | Inversora